En el mundo empresarial, existen organizaciones que son ejemplo y que marcan el camino a seguir para muchas otras. En este caso, queremos hablar de Google, que se destaca en muchos ámbitos, ya que siempre busca innovar. Para este artículo, hablaremos de su Proyecto Aristóteles, el cual aborda la cultura laboral desde el caso de la gigante tecnológica.
¿De qué se trata esta metodología?, ¿cuáles son sus objetivos?, ¿qué hallazgos arrojó el Proyecto Aristóteles? Si quieres saber más sobre esta filosofía y su importancia, no te pierdas lo que te contaremos a continuación.
Proyecto Aristóteles: ¿qué es y cómo surgió?
Seguramente has visto imágenes o has escuchado hablar sobre las espectaculares oficinas de Google y cómo debe ser trabajar allí. Para muchos profesionales debe ser todo un sueño ser parte de esta compañía y claramente los entendemos. Su preocupación por brindar las mejores herramientas a sus colaboradores es indudable.
Para darte una referencia, hablaremos del reconocido Proyecto Aristóteles, una filosofía brillante que ha brindado grandes aportes para la cultura laboral. ¿De qué se trató en sí? Esta se empezó a desarrollar en el 2012 como una iniciativa que tenía un gran objetivo: descifrar el código o el secreto de los equipos de trabajo de alto rendimiento.
De esta manera, intentaron descubrir por qué algunos grupos funcionaban de manera excepcional, mientras que otros no lo hacían igual. Frente a esto, había muchas teorías que hablaban sobre la influencia de la personalidad o nivel académico de los miembros de un equipo en el éxito del mismo. Para sorpresa de muchos, ninguno de estos dos factores reflejaban la verdadera clave.
Más allá de que esta investigación tuvo una inversión de millones de dólares y de más de cinco años de dedicación, se puede decir que valió la pena. Y esto no solo para Google, sino para todas las organizaciones que quieran conocer la fórmula para conformar un equipo de trabajo exitoso y así replicarlo en sus grupos de colaboradores.
¿Cuáles fueron los descubrimientos del Proyecto Aristóteles?
Ya sabes cuál era el principal objetivo del Proyecto Aristóteles, pero aún no has podido descubrir los resultados de esta investigación. Pues bien, queremos decirte que para este estudio fueron reunidos un equipo que agrupó desde expertos estadísticos, pasando por psicólogos, hasta sociólogos e ingenieros. El mismo tuvo que analizar cientos de equipos de Google y una gran cantidad de datos.
Contrario a la creencia popular, las características individuales de los miembros del equipo no era un factor determinante para su éxito. Mientras tanto, lo que sí identificó el proyecto fueron cinco elementos que contribuían a desarrollar un equipo de alto rendimiento y que son los siguientes:
1. Seguridad psicológica
Para empezar, uno de los factores que pueden contribuir al éxito de un equipo, según el Proyecto Aristóteles, es la seguridad psicológica. ¿De qué se trata? Es, nada más y nada menos, que aquella sensación de que los miembros de un grupo pueden compartir pensamientos e ideas, además de admitir errores y tomar riesgos sin sentirse juzgados.
2. Confianza
Ligado al primero, el elemento de la confianza y la fiabilidad también fue otro de los hallazgos clave del Proyecto Aristóteles Google. Con este, hacemos referencia a que los colaboradores tienen la certeza de que sus compañeros cumplirán con sus compromisos. Sumado a esto, también se tiene en cuenta el apoyo mutuo que debe existir entre todos.
3. Claridad
Ya no solo un equipo, una persona que está más cerca del éxito es aquella que tiene claro y sabe hacia donde va. En este caso, los grupos de alto rendimiento tienen claros sus objetivos y también cuáles son sus roles. Adicionalmente, saben, sin importar su posición, cuál es el plan de acción de su organización.
4. Trabajo a conciencia
En un equipo de trabajo, todos deberían tener como objetivo el dar lo mejor de sí para cumplir los objetivos propuestos. En ese sentido, debemos hacer referencia al significado del trabajo para un grupo. Es esa creencia compartida de que el trabajo que realiza el grupo verdaderamente tiene un impacto positivo, ya sea en el mercado, en la sociedad o en su entorno más próximo.
5. Impacto social
Por último, y ampliando los últimos renglones del anterior elemento, tenemos al impacto social. Según el Proyecto Aristóteles, dentro de un grupo de trabajo, las personas aprecian de manera genuina la oportunidad de trabajar con colegas que se respetan y se valoran. En general, es notable como un ambiente o escenario de confianza y apoyo es fundamental.
De acuerdo a los mencionados hallazgos, esa idea de que los «equipos estrella» están conformados por mentes brillantes que trabajan de forma aislada hay que desecharla. Lo que debería proponerse como una prioridad es la colaboración, la comunicación y la confianza mutua.
¿Cómo potenciar la información recopilada por el Proyecto Aristóteles?
Tras descubrir todo lo que tienen para aportar el Proyecto Aristóteles a las empresas, queremos darte algunas recomendaciones. Ya tienes claros cuáles son los factores para construir un equipo de trabajo exitoso, pero ¿de qué manera impulsarlos? A continuación, algunos consejos que podrías llevar a cabo dentro de tu organización:
- Desarrolla programas de capacitación enfocados en la construcción de la confianza, comunicación asertiva y seguridad psicológica. Tus colaboradores lo agradecerán, pues esto también lo podrán aplicar a sus vidas personales.
- Lleva una buena gestión del desempeño de tus grupos de trabajo. Por medio de la recopilación de datos podrás conocer mejor a tus equipos, su rendimiento y así evaluar la necesidad de impulsar planes de mejora.
- El diseño o la estructura organizacional es fundamental para que tus equipos de trabajo presenten un mejor desempeño. A partir de la reevaluación de esta, podrás fomentar la colaboración y la interacción entre los grupos de colaboradores.
- Genera espacios de diálogo, momentos de confianza para conocer más sobre tus colaboradores, sus gustos y también sus necesidades. Así, tendrás más herramientas para relacionarte con ellos y darles las mejores condiciones para desarrollar sus labores.
En conclusión, el éxito de un equipo no radica en las grandes o excepcionales habilidades individuales de los colaboradores. Más bien, la cultura compartida y la confianza brindada son factores claves para que un grupo pueda marchar y encontrar los mejores caminos hacia el éxito.
