El debate de la legalización de las plataformas digitales de transporte como Uber, Didi, Cabify, InDriver, entre otras, que actúan como intermediarios entre conductores y usuarios empieza a tomar cuerpo en el Congreso colombiano. Recientemente, más de 40 congresistas de la cámara baja del país latinoamericano respaldaron el proyecto de ley que busca «equilibrar la cancha» entre taxis y apps, así como darle a los usuarios la posibilidad de escoger en qué se quieren mover.
Así lo expresó a los medios de comunicación el representante a la Cámara del partido Alianza Verde Mauricio Toro, uno de los abanderados de esta iniciativa. De la misma forma, este congresista, en declaraciones al programa Voces RCN del medio colombiano RCN Radio, comentó que lo ocurrido el pasado 29 de marzo «es un hito histórico», teniendo en cuenta que estas plataformas llevan 10 años operando en el país cafetero y que, ya van transcurrido tres desde que esta regulación ha buscado, sin suerte, su aprobación.
«El Congreso entendió hoy que esta discusión ya se tiene que dar: son los ciudadanos los que tienen que tener la libertad de escoger con seguridad en qué se quieren movilizar, de acuerdo a su presupuesto; su sensación de seguridad y, claramente; a su comodidad», afirmó Toro.
Él también agregó que este proyecto de ley, en cuya creación han participado representantes de casi todos los partidos políticos, «es una muy buena noticia para los ciudadanos, pero también para los taxistas no propietarios, para el taxista propietario y para los conductores honestos de las plataformas de transporte».
¿Qué cambios supone la aprobación de esta iniciativa?
Una de las principales claves es que, de aprobarse este proyecto de ley, se eliminarían los cupos de los taxis amarillos. No obstante, se compensaría a quienes hayan invertido en la compra de un «cupo», que es como se le conoce al derecho a utilizar un vehículo como servicio de transporte.
De esta forma, se eliminará la limitación a la cantidad de estos permisos concedidos para la prestación del servicio, un sistema que para muchos ha sido origen de corrupción y de constitución de monopolios. Asimismo, la regulación autorizaría finalmente a las plataformas digitales de movilidad para prestar sus servicios de transporte y estas, a su vez, deberán aportar el 1% de sus ganancias a un fondo que permitirá compensar a los taxistas, así como contribuir a la malla vial.
Otra de las novedades que pondría sobre la mesa la eventual entrada en vigor de este proyecto serían:
- La obligatoriedad de contratación de pólizas de seguro por parte de aquellos conductores que operan a través de las mencionadas plataformas.
- Estar debidamente inscrito en el Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT).
- Tener al día las revisiones técnico-mecánicas, al igual que pagar los impuestos correspondientes a sus ingresos.
A lo anterior, se suma que las plataformas deberán establecer, por lo menos, una sede física en el país y tener herramientas para garantizar que ningún conductor trabaje más de ocho horas seguidas sin descanso. De igual forma, los vehículos que presten este servicio no podrán tener más de 10 años de antigüedad.
El sistema de fijación de precios es otro de los factores que se verían modificados por esta regulación. De ser aprobada, las plataformas digitales tendrían libertad en su sistema de oferta y demanda para determinar las tarifas.
¿Cuál es el siguiente paso?
«Es un primer paso, nunca habíamos logrado eso», señaló el representante a la Cámara Mauricio Toro a RCN Radio, quien añadió que tras la positiva votación al informe «falta la discusión de cada uno de los artículos». «Ya se abrió el debate y es uno de los cuatro debates que tiene que tener», sostuvo.
En ese sentido, explicó que «ahora pasa a ese primer debate, que no va a ser fácil, pero que hoy tiene una visión muy distinta a la de hace unos años, que es que hay que reglamentar para poder lograr que estas plataformas puedan operar, equilibrando la cancha, claramente. Van a tener que tener una serie de obligaciones, vamos a quitarles muchas de las cargas obsoletas al sector taxista y a proteger el patrimonio de los taxistas que han invertido en esos cupos en los vehículos y reglamentar las plataformas para que puedan operar».
Palabras finales
Según el estudio Una mirada al impacto de la tecnología en la movilidad durante la pandemia, elaborado por DIDI, Invamer y la Universidad del Rosario y publicado en noviembre de 2020, el 91,5% de los colombianos está de acuerdo con el desarrollo e implementación de una regulación moderna que responda a los avances tecnológicos de las plataformas de movilidad.
En ese orden, el 73,7% confía en el servicio que intermedian estas plataformas de movilidad en la ciudad y en sus socios.
Por otra parte, el estudio señala que el 87% de los colombianos está de acuerdo con que las plataformas de movilidad son una buena alternativa para generar ingresos en el país. De igual forma, el informe arrojó que el 85,8% ve estas aplicaciones como una opción económica y accesible. Así, concluye que «la innovación contribuye a la calidad en el servicio y que hay una inminente transformación de este mercado que en últimas se traduce en beneficio de los usuarios».
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